Cruzamos el inmenso país para llegar hasta la capital federal...el gran Buenos Aires nos espera para disfrutar al máximo de unos días como verdaderas cosmopolitas...
El famoso barrio de Boca es visita obligada para todo aquel que pone sus pies en esta pedazo de capital, barrio en el que las calles son música, tradición, tango...
Y pisamos uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad...EL CAMINITO
Nos reciben los grandes de la Argentina...Maradona, Evita y Gardel nos saludan desde el balcón mientras nosotras disfrutamos de las calles de este barrio
Música y tango en cada esquina...
En el aire se respiran sus colores, sus sonidos...
Nosotras estamos alojadas en San Telmo, uno de los barrios históricos de Buenos Aires, un lugar bohemio y pintoresco donde pasear y recorrer sus calles empedradas es vivir en una auténtica película donde las "prota" esta vez éramos nosotras...jiji.
Como cada domingo San Telmo despliega su mercado ambulante, uno de los más grandes del mundo, con manzanas y calles llenas de gente y música. Aquí puedes encontrar cualquier cosa que imagines... de hecho había tantas que nos aturullamos y no podíamos decidir que comprar y que no...todo nos gustaba, jeje!
Y en una de las calles de este barrio nos encontramos la casa donde vivió Mafalda...
No podíamos estar en Argentina sin meternos entre pecho y espalda un típico y sabroso asado bien bañado en vino tinto. ¡¡Que rica estaba la carnaza!!
Visitamos la mítica e histórica plaza de Mayo, donde se reúnen las madres cada miércoles para recordar a los desaparecidos del régimen y donde se encuentra la casa Rosada, casa del Gobierno argentino.
LA casa Rosada
Y todo el viaje esperando este momentazo!! Recital de LOS AUTÉNTICOS DECADENTES en el Luna Park! Vaaaaaaaaaamooooooos!!! Casi tres horas de sudar, bailar, disfrutar, cantar, gozar... eso si, sin una gota de alcohol porque que sepáis que en sudamerica NO se bebe en los conciertos para evitar quilombos.
Menos mal que nos tomamos una Quilmes antes de entrar para no morir deshidratadas...
Yujuuuuuuuuuuuuu!!!
Como verdaderos peces de ciudad (había que aprovechar después de tanta natura), nos dimos unos caprichitos... hasta cena japonesa.
Ballet en el teatro Colón.
Mientras disfrutábamos de la obra de Carmen cual buenas culturetas, en la ciudad porteña, una tormenta-tifón arrasó con todo. Nuestro único daño fue material, toooodo, absolutamente todo nuestro calzado estaba en el balcón del hostal, por tanto se llevó una buena mojadina.
Pasamos varias tardes en La Catedral, una de las milongas de la ciudad, en las que puedes tomar unas clases de tango, disfrutar de una buena cena y empaparte de la verdadera y más profunda cultura tanguera.
Paseando por la calle del hostal tuvimos un encuentro inesperado y casual con Gaspard, un francés con el que habíamos tenido el placer de viajar en los primeros días en Perú. Entre los 13 millones de habitantes fue una gran sorpresa!!
¡Así que como despedida nos juntamos para pasar una buena noche!
Lo que iban a ser 4 días se convirtieron en 11... ¡esta ciudad atrapa!
Próxima estación... Iguazú
NOS CONTAMOS
